¿Y por qué no vivir en Port Saplaya?

Imagina vivir en un lugar donde el único sonido que perturbe tus sueños sea el batir de las olas en la orilla o el tintineo de los aparejos de los veleros meciéndose en el puerto. Imagina salir de trabajar, llegar a casa y dar un paseo por la playa, ahogar las preocupaciones en fondo del mar para después, recargarte de energía mientras recorres la dársena serpenteante plagada de barcos. Deja que tu mirada se pierda en el reflejo de las farolas en las aguas, aguas en calma de un pequeño puerto rodeado por edificios de colores, formas y alturas diversas.

Imagina despertar cada mañana con el sol naciendo desde el mar frente a tu ventana. Dime si no deseas con todas tus fuerzas sentir que tu hogar se encuentra en una “isla” amable sobre la que planean las gaviotas, donde los niños todavía juegan en las plazas, hacen castillos en la arena y juegan al escondite entre los jardines. ¿Imaginas un lugar más amable en el que vivir?

¿Y si ese lugar existe y además está más cerca de lo que imaginas?

Vive en Port Saplaya, un oasis de paz a tan sólo 4 km de la ciudad.